No cabe duda, a estas alturas, de que la presoterapia se ha convertido ya en todo un clásico en cualquier centro de estética. Pero hoy queremos responder a una pregunta habitual en cualquier centro de belleza: ¿adelgaza la presoterapia?
La respuesta, como suele pasar en estos casos, no es un “si” o un “no” rotundo, sino que tiene diversos matices que conviene explicar. Dicho esto, hablemos de los mitos y verdades sobre la presoterapia y sus propiedades adelgazantes. ¡No te lo pierdas!
Funcionamiento de la presoterapia
Antes de nada, vamos a resumir las propiedades básicas de la presoterapia. Se trata de un tratamiento estético no invasivo, que mediante la aplicación de presión de aire en diferentes partes del cuerpo, ayuda a mejorar la circulación y reducir la retención de líquidos.
Además de la máquina de presoterapia, se suelen utilizar unas botas, mangas o fajas que se aplican directamente sobre la parte del cuerpo a tratar: piernas, brazos, abdomen, etc. A través de presión secuencial o intermitente, la presión de aire estimula la circulación sanguínea y linfática, ayudando a movilizar líquidos, aliviar la sensación de piernas cansadas, reducir la hinchazón o mejorar la apariencia de la piel, entre otros beneficios palpables desde la primera sesión.
Una de las mayores virtudes de la presoterapia es que se trata de un tratamiento muy seguro y recomendable para cualquier persona. ¿Adelgaza la presoterapia? Eso ya es una cuestión que conviene responder con calma…
¿Adelgaza la presoterapia?
La presoterapia, por sí sola, no está concebida con el fin del adelgazamiento. No podemos decir que esta técnica sea un método directo para la pérdida de peso. Si bien es cierto que se puede utilizar como un complemento útil, por sus capacidades para mejorar la textura de la piel y reducir la inflamación de ciertas partes del cuerpo, no podemos esperar que, por sí sola, una sesión de presoterapia nos haga perder peso sin más.
Sin embargo, la eficacia de la presoterapia para reducir la retención de líquidos y la celulitis sí que pueden contribuir a conseguir unos mejores resultados, si la acompañamos de otras estrategias adelgazantes como la práctica de ejercicio físico, la dieta u otras técnicas que sí estén específicamente diseñadas para adelgazar.
Mitos y verdades sobre la capacidad adelgazante de la presoterapia
Una vez aclarado este punto de manera general, vamos a hacer un pequeño repaso de los principales mitos y verdades sobre la pregunta que hacíamos al iniciar este artículo: ¿adelgaza la presoterapia?
- Mito: La presoterapia adelgaza, porque elimina la grasa corporal directamente.
- Verdad: La presoterapia no elimina la grasa de forma directa. Ayuda a mejorar la circulación sanguína y linfática, lo que contribuye a reducir la retención de líquidos y eso puede generar una reducción temporal de volumen. Pero no “quema grasa” por sí sola.
- Mito: La presoterapia es un método de adelgazamiento eficaz y duradero.
- Verdad: La presoterapia proporciona algunos beneficios estéticos, como la reducción de la celulitis y puede aportar cierta reducción de volumen a corto plazo. Pero no es un método de adelgazamiento.
- Mito: La presoterapia acelera el metabolismo y quema calorías por sí sola.
- Verdad: esta técnica no contribuye a acelerar el metabolismo, pero sí ayuda a mejorar el sistema circulatorio sanguíneo y linfático, como ya hemos explicado anteriormente.
- Mito: La presoterapia elimina permanentemente la celulitis.
- Verdad: La presoterapia ayuda a hacer la celulitis menos visible y a mejorar el aspecto general de la piel, pero no elimina la celulitis de forma permanente.
¿Adelgaza la presoterapia? Consideración final
Teniendo en cuenta todo lo expuesto anteriormente, es fácil dar una respuesta a la pregunta base de este artículo. La presoterapia no adelgaza, ni es un método para quemar grasas o acelerar el metabolismo de forma permanente.
Sin embargo, sí constituye un acompañamiento excelente a una dieta variada o un plan de entrenamiento físico, por los tres beneficios principales que hemos explicado con anterioridad: ayuda a mejorar la circulación sanguínea y linfática; mejora el aspecto de la piel y contribuye a reducir la retención de líquidos. Todas estas ventajas, justo a su funcionamiento no invasivo y muy seguro, hacen de la presoterapia un tratamiento apropiado para casi cualquier persona que quiera mejorar de manera general su salud y su aspecto físico.
